Rascador para patas de mesa

Los gatos no se afilan las uñas para fastidiarnos y estropear todos nuestros muebles, lo hacen por necesidad. Así que es obligatorio disponer de rascadores en cualquier casa que la que viva algún gato.

Pero hay veces que no se dispone de sitio y es difícil encontrar el hueco adecuado para meter una torre rascadora tradicional. Para eso existen rascadores que se pueden colgar o como en este caso, agarrar a la pata de una mesa (o cualquier otro elemento vertical de tu casa) convirtiéndola así en un rascador donde el gato pueda satisfacer sus necesidades sin romper nada. Pero además, al contrario que otros pequeños rascadores, cualquier pata de mesa tiene la altura suficiente para que el gato pueda ponerse de pie comodamente para afilar sus uñas.

Y no hay que olvidar que cumple una importante segunda función: proteger la pata de la mesa. Especialmente si son de madera, el gato puede querer afilar sus uñas en ella. Con este rascador proteges la pata además de proporcionar un lugar donde satisfacer sus instintos.

El rascador está fabricado con peluche y sisal y se adapta a practicamente cualquier pata de mesa. Gracias a su base antideslizantes es muy estable impidiendo que se deslice arriba y abajo mientras el gato juega.

Cuenta además con una pelota de peluche colgante para que el gato juegue.